Hay discos, libros o películas que tú no eliges, sino que son ellos los que te eligen a ti, y este es un claro ejemplo de algo que seguramente os haya pasado alguna vez también a vosotros. Hace algunas semanas dando una vuelta por la sección de películas de la Fnac mis ojos se fijaron en un título bastante llamativo “Hacia Rutas Salvajes” al que acompañaba de una carátula no menos impactante (al menos gente que ama la montaña como yo) donde se veía a un joven mochilero encima de un autobús. Por detrás una simple, pero clara descripción me atrapó aún mas: Es la historia de un joven que tras graduarse, cortó todos los lazos con su familia, donó todo su dinero a una ONG y se internó solo y poco equipado por tierras de Alaska para vivir una vida en estado salvaje, cuatro meses después unos cazadores encontrarían su cuerpo sin vida…..
Lo más curioso es que cuando cambié de planta habiendo renunciado a la compra de la película (A pesar de haberme atraído bastante y haber apuntado el nombre de la misma en el móvil). ¡Zas! Mis pasos me llevaron hacia la zona de libros donde sin buscarlo me topé con el libro de Jon Krakauer sobre el que luego Sean Penn basaría la película antes comentada. Lógicamente era demasiada coincidencia, así que se vino conmigo y no sobra decir que me atrapó desde el principio y que ha sido cuestión de una semana darle fin al libro y a la película.
Ufffffff que bueno que las “hilanderas” hayan hecho que este libro y película hayan entrado en mi vida. (Hay una amiga mía que dice que existen unas “hilanderas” que se dedican a tejer nuestras vidas, relacionando unas cosas con otras, estando todo unido). Sea como fuere este libro y la película han entrado en mi vida justo en el momento en el que más me planteo ciertas cosas…..
Bueno, ciñiendome al libro comentar que “Hacia Rutas Salvajes” o “Into the Wild” es la reconstrucción de la aventura vivida de un joven llamado Chris McCandles que tras graduarse en 1990 en la Universidad Emory de Atlanta, donó los 24000 dólares que tenía para estudiar derecho y emprendió un periplo que finalmente le llevaría a la muerte en Alaska. El libro surgió como prolongación de un artículo que escribió Krakauer en la revista Outside y que le hizo quedar profundamente enganchado a esta historia, tal vez aumentaba esta curiosidad el que el mismo autor hubiera sido montañero y a lo largo de su experiencia se encontrara en situaciones mas o menos similares (Relatando alguna en el libro).
Antes de empezar el libro ya sabes el desenlace de la historia, pero el intentar averiguar el porque del trágico final y porque se vio motivado a emprender esta aventura, te atrapa desde las primeras páginas. Con un ingenioso juego narrativo Krakauer nos hace avanzar y retroceder en el tiempo para intentar resolver el enigma a través de las opiniones y anécdotas de las personas que se cruzaron en el camino de “Alex Supertram” (Cambió su nombre durante su viaje). Asimismo vas compartiendo el viaje improvisado de McCandles, su navegación por el río Colorado hasta el Golfo de California, la permanencia temporal en Bullhead City, el viaje con dos hippies motorizados (Jan y Bob), los momentos con un viejo veterano de guerra (Ronald Franz) y el cambio que produjo en la vida de este el conocer a Alex… A través de todos ellos vas viendo y determinando el perfil de este joven soñador (Culto, afable, inteligente, enigmático, decidido, terco en ocasiones….).
El autor asimismo se ayuda de experiencias similares de otros personajes que a lo largo de la historia también abandonaron las comodidades y buscaron unas experiencias que en muchas ocasiones les llevaron a la muerte.
Completa la historia a través de las citas subrayadas en los libros que se llevó en su viaje por Alaska y por las anotaciones que dejó en las páginas blancas de una guía de campo de plantas comestibles, así podemos también reconocer lo que pensaba Alex durante su estancia en Tierras Salvajes, como se sentía y de que sobrevivió durante el tiempo que estuvo en el llamado “Autobús Mágico”.
Lo más curioso es que cuando cambié de planta habiendo renunciado a la compra de la película (A pesar de haberme atraído bastante y haber apuntado el nombre de la misma en el móvil). ¡Zas! Mis pasos me llevaron hacia la zona de libros donde sin buscarlo me topé con el libro de Jon Krakauer sobre el que luego Sean Penn basaría la película antes comentada. Lógicamente era demasiada coincidencia, así que se vino conmigo y no sobra decir que me atrapó desde el principio y que ha sido cuestión de una semana darle fin al libro y a la película.
Ufffffff que bueno que las “hilanderas” hayan hecho que este libro y película hayan entrado en mi vida. (Hay una amiga mía que dice que existen unas “hilanderas” que se dedican a tejer nuestras vidas, relacionando unas cosas con otras, estando todo unido). Sea como fuere este libro y la película han entrado en mi vida justo en el momento en el que más me planteo ciertas cosas…..
Bueno, ciñiendome al libro comentar que “Hacia Rutas Salvajes” o “Into the Wild” es la reconstrucción de la aventura vivida de un joven llamado Chris McCandles que tras graduarse en 1990 en la Universidad Emory de Atlanta, donó los 24000 dólares que tenía para estudiar derecho y emprendió un periplo que finalmente le llevaría a la muerte en Alaska. El libro surgió como prolongación de un artículo que escribió Krakauer en la revista Outside y que le hizo quedar profundamente enganchado a esta historia, tal vez aumentaba esta curiosidad el que el mismo autor hubiera sido montañero y a lo largo de su experiencia se encontrara en situaciones mas o menos similares (Relatando alguna en el libro).
Antes de empezar el libro ya sabes el desenlace de la historia, pero el intentar averiguar el porque del trágico final y porque se vio motivado a emprender esta aventura, te atrapa desde las primeras páginas. Con un ingenioso juego narrativo Krakauer nos hace avanzar y retroceder en el tiempo para intentar resolver el enigma a través de las opiniones y anécdotas de las personas que se cruzaron en el camino de “Alex Supertram” (Cambió su nombre durante su viaje). Asimismo vas compartiendo el viaje improvisado de McCandles, su navegación por el río Colorado hasta el Golfo de California, la permanencia temporal en Bullhead City, el viaje con dos hippies motorizados (Jan y Bob), los momentos con un viejo veterano de guerra (Ronald Franz) y el cambio que produjo en la vida de este el conocer a Alex… A través de todos ellos vas viendo y determinando el perfil de este joven soñador (Culto, afable, inteligente, enigmático, decidido, terco en ocasiones….).
El autor asimismo se ayuda de experiencias similares de otros personajes que a lo largo de la historia también abandonaron las comodidades y buscaron unas experiencias que en muchas ocasiones les llevaron a la muerte.
Completa la historia a través de las citas subrayadas en los libros que se llevó en su viaje por Alaska y por las anotaciones que dejó en las páginas blancas de una guía de campo de plantas comestibles, así podemos también reconocer lo que pensaba Alex durante su estancia en Tierras Salvajes, como se sentía y de que sobrevivió durante el tiempo que estuvo en el llamado “Autobús Mágico”.
Sobre la película indicar que Sean Penn en el papel de director y guionista acierta plenamente en convertir la historia de McCandless en una “road movie”. La película está genialmente desarrollada, siendo muy fiel al libro, así que las dos horas y media de la misma y a pesar de algunos altibajos, pasa sin darte cuenta. Además de la genial fotografía y dirección me quedo con el papel de Emile Hirsch en el papel de McCandless, simplemente genial.
Tanto el libro como la película dan mucho para pensar y recapacitar primero en la vida de Alex y luego en la tuya propia. Para muchos de los que leemos esta aventura envidiamos en cierta parte esa valentía de decidir que hacer con tu vida y cumplir tu sueño, aunque este te lleve al fín. Para otros muchos solo será un joven idealista, incauto y obstinado que no supo calcular las consecuencias de su atrevimiento, una persona que fue injusta con su familia, muy egoísta y que causó un dolor enorme a los suyos al emprender esta aventura. Su ultima aventura.
Tanto el libro como la película dan mucho para pensar y recapacitar primero en la vida de Alex y luego en la tuya propia. Para muchos de los que leemos esta aventura envidiamos en cierta parte esa valentía de decidir que hacer con tu vida y cumplir tu sueño, aunque este te lleve al fín. Para otros muchos solo será un joven idealista, incauto y obstinado que no supo calcular las consecuencias de su atrevimiento, una persona que fue injusta con su familia, muy egoísta y que causó un dolor enorme a los suyos al emprender esta aventura. Su ultima aventura.
Pero tal vez, cuando veas esta foto y te fijes en la cara de felicidad que tiene McCandless, tal vez entonces empieces a pensar como el. Esta es una de las fotos reveladas tras encontrar el cadáver, donde aparece superdelgado, donde ya había conocido el hambre, donde sabía de la dureza de una vida así y donde posiblemente intuía que podría no salir de esa aventura......... pero estaba cumpliendo su sueño lo que le hacía tremendamente feliz.
Muuuuucho para pensar si señor.
Parece muy interesante este libro que comentas. Lo malo es que ahora cuando me digas que te vas tu solo a patear por ahi, me vas a preocupar. Je je je...
ResponderEliminarSaludos!!!
La verdad es que es uno de las películas (casi documental) que más me han sorprendido, me la recomendaron y tardé un poco en verla porque no suelen gustarme este tipo de películas o más bien, me dan pereza, pero al final acabé viéndola y es alucinante... altamente recomendable...
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